martes, 12 de enero de 2016

cada hombre mata lo que ama.
Unos matan con su odio, 
otros con blandas palabras;
el cobarde, con un beso, 
y el valiente, con una espada

Unos lo matan cuando jóvenes,
y cuando viejos los otros;
unos con manos de oro,
los otros con manos de lujuria lo estrangulan;
el más compasivo, con un puñal
pues los muertos así, pronto se enfrían.

Aman mucho unos; otros, demasiado poco.
Algunos lo venden, otros lo compran.
Unos aman entre llanto,
sin un leve suspiro otros.
Porque cada hombre mata lo que ama
pero no todo lo que se mata muere.